El día de hoy se dio a conocer el dato de inflación general es Estados Unidos, un aumento del 4.2%, su nivel más alto desde el 2008, esta cifra desde nuestro punto de vista es normal y no lo consideramos un dato relevante debido a que se toma una base muy baja, el cierre de la economía entre abril y mayo provocó un colapso en los precios de los bienes y servicios provocados por un periodo de demanda reprimida.

Con el repunte económico por la reapertura parcial y la fuerte inyección de estímulos era lógico que se diera un repunte en el índice de precios a ese nivel, por lo que no debería impactar la cifra y es muy probablemente que los siguientes meses veamos a la inflación en los mismos niveles.



La narrativa de la Reserva Federal por el momento sigue siendo dovish, Jerome Powell ha mencionado que el efecto de la inflación es transitorio, si bien creemos que no será permanente el aumento de precios, la misma recuperación del mercado laboral sería un factor de riesgo para que continúen las precio de inflacionarias, es donde el banco central podría preocuparse por los precios.


Como lo mencionamos anteriormente la lectura de inflación era evidente y predecible, en la postura de la Reserva Federal podría haber un mensaje oculto y hace énfasis en que la inflación es transitoria, la posibilidad de dar un giro en el tono de la política monetaria es muy alta y efectivamente si actúa con movimientos en las tasas podríamos observar nuevamente al índice de precios en niveles del 3%.



La preocupación no solamente es el aumento de precios, los factores de riesgo adicionales son el mercado inmobiliario y la exuberancia irracional que se vive en la mayoría de los activos, desde el mercado accionario hasta las criptomonedas debido a toda la euforia provocada por la especulación, la reacción del mercado el día de hoy no fue por el efecto que pudiera tener la inflación sobre la economía o un freno en el crecimiento económico, sino la posibilidad de que la FED comience a cerrar el grifo del dinero, en un mercado donde hay una fuerte adicción por la liquidez.